Te mostramos algunos consejos para evitar el insomnio e intentar combatirlo de forma totalmente natural y muy eficaz.
El insomnio es la incapacidad de una persona para conciliar el sueño, permanecer dormido o dormir las horas que necesita para descansar adecuadamente.
Actualmente, el estrés y el acelerado ritmo de vida hacen que crezca el número de personas que sufren insomnio.
La cuarentena o el aislamiento social que se está viviendo en el mundo entero para evitar la propagación de la COVID-19 está afectando nuestros hábitos y nuestro patrón del sueño.
La pandemia ha desencadenado varios fenómenos de todo tipo produciendo alteraciones como la ansiedad, la depresión y los trastornos del sueño.
Existen tres síntomas principales que nos indican que tenemos problemas de insomnio.
- Dificultad para conciliar el sueño (la persona pasa mucho tiempo acostada o dando vueltas en la cama antes de poder dormirse).
- Despertarse muy temprano por las mañanas sintiéndose agotado, cansado y mostrando somnolencia, irritabilidad y dificultad para concentrarse durante el día.
- Despertarse con frecuencia durante la noche o dormir a ratos.
Algunos de los efectos que produce la falta de descanso son:
- Agotamiento y malestar general.
- Ansiedad, depresión e irritabilidad.
- Cambios de humor.
- Falta de atención.
- Deterioro de la respuesta motora.
- Disminución de la capacidad de toma de decisiones.
- Problemas de memoria.
- Ralentización de la visión y del habla.
Las consecuencias del insomnio disminuyen la calidad de vida y la salud de las personas.
¿Qué podemos hacer para intentar evitar el insomnio?
-. Establece una rutina saludable
Encuentra alguna actividad que te relaje justo antes de ir a la cama, evita ver la televisión o navegar por la red y establece unos horarios para acostarte y despertarte que sean adecuados y puedas seguir incluso los fines de semana. Antes de irte a dormir puedes disfrutar de un baño o caliente.
–. Utiliza la cama solo para dormir
No mires televisión ni ningún dispositivo, no comas en ella, busca otro lugar para leer y no te lleves trabajo a la cama. Asegúrate de tanto tu cama como el colchón sean los suficientemente cómodos.
-. Evita el tabaco, el alcohol y las bebidas energizantes.
El tabaco es un excitante y los síntomas de abstinencia pueden hacer que te levantes durante la noche si no consigues dormir. La cafeína, la teína y el alcohol también son nocivos para conciliar o mantener el sueño.
-. Práctica algún deporte o ejercicio físico.
Practicar deporte de forma regular durante el día mejora la calidad del sueño. Procura hacer ejercicio unas tres horas antes de irte a la cama, para que el cuerpo tenga tiempo de relajarse físicamente antes de irse a dormir.
-. Las siestas deben ser cortas
Para que no nos quiten el sueño por la noche, las siestas no deben durar más de 10 ó 20 minutos y procurando que sean antes de las 4pm.
-. Practica alguna técnica de relajación
Disciplinas como el yoga, la meditación, las técnicas de respiración o la relajación pueden ser muy efectivas. Los hábitos saludables deben ser parte de nuestra rutina.
-. Cuida lo que comes.
Evita las cenas copiosas de digestiones pesadas y toma infusiones relajantes naturales como la valeriana o la manzanilla, que ayudan a reducir la ansiedad y a conciliar mejor el sueño. Los plátanos, los huevos o la leche son alimentos ricos en triptófano que facilitan conciliar el sueño.