Algo tan simple y económico como un cubito de hielo puede sustituir algunos de tus productos preferidos para el cuidado de la piel de tu rostro.
Te mostramos algunos de sus beneficios. ¡Te encantarán!
- Piel radiante
Frotar la piel de tu rostro con un cubito de hielo estimula que los vasos sanguíneos se contraigan, lo que reduce el flujo de sangre hacia la piel. Comenzará a circular mejor hacia tu cara y como resultado, tendrás una apariencia más saludable.
- Ayuda a absorber los productos de belleza
Rozar hielo sobre tu crema facial ayuda a que el producto penetre en la piel. Cuando los capilares de la cara se contraen, crea un efecto de tensión que colabora a absorber mejor los productos de belleza.
- Reduce las ojeras
Si aplicas hielo regularmente en tu rostro se reducen los vasos dilatados, lo que ayuda a minimizar las ojeras y la inflamación en los ojos. Envuelve un cubo de hielo con un pañito y aplícalo en la piel debajo de los ojos.
- Efecto mate
Frotar hielo en tu rostro disminuye el volumen de los poros que producen la grasa, lo que le brinda a la piel un aspecto mate. Aplica un poco de jugo de pepino al hielo para mantener tu piel hidratada.
- Ayuda a exfoliar tu piel
Haz cubitos de hielo con leche, es un exfoliante natural. El ácido láctico que contiene la leche, ayuda a eliminar las células muertas, mientras que el hielo le aporta una apariencia radiante.
- Mayor duración del maquillaje
Frotar hielo en el rostro antes de aplicar la base tonifica y tensa la piel, lo que colabora a que el maquillaje se fije y dure más tiempo. Cubrir el maquillaje recién aplicado con una capa de polvo compacto y luego sumergir la cara durante 20 segundos en un recipiente con agua helada dará como resultado una apariencia mate que durará durante horas.
¿Ya has utilizado tratamientos faciales con hielo? Cuéntanos cómo te ha ido en los comentarios.
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