Para lograr un look total no puedes descuidar tu mirada, y para hacerte la vida más fácil se inventaron las pestañas magnéticas, tecnología y belleza al alcance de tu mano
Su objetivo es básico, no perder tiempo limpiando residuos de pegamento o despegándolas porque no quedaron bien; resultan fáciles de colocar, son cómodas, aunque también tienen sus desventajas.
Ventajas de las pestañas magnéticas
Las pestañas magnéticas también son reutilizables, lo que te permite ahorrar dinero, y son una alternativa si no quieres recurrir a otras técnicas como las extensiones; pero en este caso, funcionan con microimanes, y al no necesitar pegamento se mantienen en mejor estado y son más duraderas.
Además, aportan volumen, grosor y profundidad a tu mirada. Para retirarlas solo tienes que tirar ligeramente con los dedos hasta que se despeguen, eso si, antes debes desmaquillarlas.
Actualmente puedes escoger el efecto que quieres conseguir y la longitud, sólo es cuestión de gustos.
Las pestañas de imán tienen menos contraindicaciones que las pestañas postizas en las que se utiliza pegamento, aunque en ambos casos, pueden sufrir daños tus pestañas naturales si las colocas a diario, ya que debilitan las tuyas y se terminan cayendo con el tiempo.
Desventajas de las pestañas magnéticas
Aunque en general son muy fácil de colocar, algunos modelos requieren paciencia, ya que tienen pequeños imanes en el centro que debes alinear correctamente para que se fijen, otras marcas concentran en el imán en una especie de pegamento que colocas como usualmente lo harías.
También acumulan polvo e impurezas que pueden ocasionar una infección ocular, y así como las pestañas postizas regulares, debilitan las naturales.
Su precio es más elevado, y requieren una pinza especial porque las pinzas normales se quedan adheridas a los imanes del producto.
Todo es cuestión de probarlas y escoger la opción que más se adapte a tus necesidades.
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